El delito comun (23)

Imagino muchas cosas, sobretodo cosas que están por pasar pero que cuando ocurren nunca son como había imaginado. El fin de semana no ha acabado y yo ya estoy cansada de tanta sorpresa. ¿Y qué pasa cuando te das cuenta de que te has metido otra vez en una película y no encuentras a nadie que te pueda explicar el final, más que nada para preparate un poco? No han pasado demasiadas horas desde la última vez que escribí y no soy capaz de explicar todo lo que ha sucedido, ni cómo ha sucedido ni mucho menos aún ,todo el reboltijo de sentimientos en los que me he perdido. Creo que no los he asimilado. Encontarte con que lo único en común que conservas con un antiguo amor es que teneis el mismo mécanico para la moto, llamadas sin respuesta, amigos que no lo son y de los que empiezas a dudar que sean ni tan siquiera conocidos, converasciones privadas a las que quieren acceder intrusos, un bar que hacía tiempo que no visitaba pero donde siguen sonando las canciones de siempre, alguien que quiere irse a la cama contigo pero al que le dices que no, uno al que le dices que venga y no viene, mensajes surrealistas de madrugada, sueños con imágenes preciosas que no podré dibujar jamás y al final,… despertarte para ir a pasear con un amigo y descubrir a un fotógrafo del que no me he cansado de repetir la tristeza que me provocan sus instantaneas. Y mi amigo, que ya sabe que siempre lloro, lleva preparados los kleenex y se alegra de que esta vez estemos en un museo y no en un supermercado. Le explico lo de mi viaje y me da ideas que me producen más ideas. Despedida. Cruzar Plaza Catalunya donde un grupo de personas alza el vuelo como las palomas mientras les persigue un policia que justo se acaba de cruzar en mi camino. Premios, reencuentros, rupturas, apuestas, lecturas de guiones y… todavía tengo que limpiar la casa y preparar algo para la cena de esta noche!!!
¿Alguien entiende lo feliz que me siento al saber que mañana problablemente será domingo?